Que no cunda el pánico...

¿Qué tal van mis florecillas?

No me he cansado shambala mia de mi corasón, sigo dando vueltas por el bosque, lo que pasa es que he andado un poco "ocupada", este fin de semana me encontre con un antro lujurioso que resultó ser un sitio de intercambio de parejas, yo por supuesto no intercambié pareja, solamente intercambié impresiones con una amiga que vino conmigo para comprobar que el asombro era evidente... qué de lujuria hay por el mundo repartida.

<------- (Imagen obtenida en el antro lujurioso)

Pero bueno, después he andado en otros menesteres y tampoco he podido escribir nada, jajaja, qué cuento tengo, si no tengo ordenador!!! Como no envie los mensajes vía telepática, no sé... Suerte que de vez en cuando "mango" un poquito de internet por aquí y por allá. Y gracias a las almas caritativas y entidades corporativas que me prestan su ordenador tan generosa y desinteresadamente.
Estrellita, corazón, de verdad que me creo que "Memento" es una gran película, lo único que mejor esperemos a que duerma un poco y se me pasen los efectos de los alucinógenos del fin de semana.
En cuanto a las nueces extraviadas que me encontré en algún comentario perdido, me quedé extremadamente conmovida, una pobre nuececilla roja, pelada y sin que ninguna ardilla le quiera... oh! qué crueldad!. Yo soy una buena ardilla y si te encuentras desvalida en el bosque te bañaré de chocolate nuececilla, ah! no!, colacao, si. Anda tontina, no llores que te quiero yo un poquito, pero no te como porque estoy a dieta... ya se sabe lo mala que es la Navidad.

Y ya no escribo más que tengo que irme a dormir, ha anochecido en el bosque y lo más seguro es buscarme un nidito confortable.

Nueces para todas mis florecillas.